La clamidia y la gonorrea son infecciones de transmisión sexual (ITS) causadas por bacterias que pueden provocar graves problemas de salud si no se tratan.
Síntomas:
Muchas personas con clamidia y gonorrea no presentan síntomas o presentan síntomas leves que pueden confundirse con una infección del tracto urinario. Cuando se presentan síntomas, estos pueden incluir:
- Dolor o ardor al orinar
- Secreción vaginal (amarilla, verde o espumosa)
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Dolor o secreción rectal
- Fiebre
Diagnóstico y tratamiento:
Ambas infecciones se pueden diagnosticar mediante una prueba de orina o un hisopado. El tratamiento consiste en antibióticos que suelen ser eficaces tanto contra la clamidia como contra la gonorrea. Es importante completar el tratamiento antibiótico según lo prescrito, incluso si los síntomas mejoran antes, para prevenir la reinfección y la resistencia a los antibióticos.
Complicaciones:
Si no se tratan, la clamidia y la gonorrea pueden provocar complicaciones graves, entre ellas:
Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP) en mujeres, infertilidad, artritis, infecciones oculares y mayor riesgo de infección por VIH.